¿El trabajo remoto nos está haciendo más solitarios? Formar una red de apoyo puede ayudar a tu equipo de trabajo Mantener conexiones genuinas en un entorno virtual puede ser un desafío. ¿Pueden los empleados y líderes fomentar aún un sentido de pertenencia en medio del enfoque transaccional del trabajo remoto?
Por Scott Healy
Key Takeaways
- El trabajo remoto puede aumentar el aislamiento a menos que los equipos construyan conexiones intencionales.
- Pequeñas acciones sociales y consistentes ayudan a contrarrestar la soledad en los lugares de trabajo virtuales.
- Los líderes deben modelar el apoyo a la salud mental y fomentar una comunicación abierta.
Las opiniones expresadas por los colaboradores de Entrepreneur son personales

Los modelos de trabajo remoto e híbrido han abierto las puertas a la eficiencia, la flexibilidad y las nuevas formas de colaborar a distancia. Pero, a medida que la tecnología mantiene a los equipos constantemente conectados, muchos empleados se sienten cada vez más aislados. Las conversaciones espontáneas en los pasillos y los encuentros informales a la hora de comer, que a menudo forjaban los lazos más fuertes en el lugar de trabajo, son cada vez más raros.
En un entorno virtual, es fácil caer en un modo transaccional, donde las tareas y las métricas son lo más importante y las conexiones personales pasan a un segundo plano.
¿Siguen existiendo formas para que los empleados y líderes generen un sentido genuino de pertenencia en este escenario, o es este el cambio inevitable que debemos aceptar como parte de la vida laboral remota?
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La dinámica de la desconexión en equipos remotos
En los ambientes tradicionales de oficina, la camaradería suele surgir de manera orgánica. Las pláticas informales y las interacciones espontáneas proporcionan una fuente significativa de apoyo y conexión. Los entornos híbridos y remotos, por otro lado, comúnmente eliminan estos encuentros fortuitos, dejando a muchos empleados con la sensación de estar varados en una isla.
Uno de los efectos de este aislamiento es que puede pasar desapercibido y parecer "normal". Es posible que los miembros de tu equipo se vean bien en la pantalla, pero esa breve videollamada podría ser el único punto de contacto que tienen con alguien más durante todo el día.
Con el tiempo, los empleados que carecen de interacción presencial a menudo sienten el efecto de "fuera de vista, fuera de mente", es decir, se vuelven prácticamente invisibles hasta que entregan sus resultados, especialmente si algunos miembros del equipo trabajan en la oficina mientras que otros están distribuidos por diferentes zonas horarias. Esta forma sutil de desconexión erosiona la moral y puede incluso afectar las oportunidades profesionales, pues los empleados remotos pueden no recibir la misma retroalimentación espontánea ni visibilidad que sus compañeros en la oficina.
El primer paso para romper este ciclo es reconocer que los entornos remotos pueden alimentar el aislamiento. Cuando los empleadores reconocen este desafío, sus equipos pueden tomar acciones deliberadas para comunicarse, dar seguimiento y asegurar que las relaciones laborales prosperen en cualquier entorno.
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Formas simples en las que los empleados pueden reconectarse
Muchas veces los empleados esperan que los gerentes o iniciativas de recursos humanos fomenten la conexión social, pero pequeñas acciones personales pueden contrarrestar significativamente el aislamiento. Sé más intencional. En lugar de simplemente enviar un mensaje en Slack, sugiere un café virtual rápido para hablar de cosas fuera del trabajo. Incluso una breve videollamada de 15 minutos o una llamada solo de audio mientras sales a dar un paseo pueden alegrar el día de alguien y reemplazar los mensajes impersonales por una conversación real.
Unirse o iniciar grupos de interés, como un club de lectura, un canal de fitness o un equipo virtual de voluntariado, puede construir un sentido de comunidad que va más allá de los entregables diarios y los KPIs. Establecer metas personales de conexión social cada semana también ayuda, incluso algo tan simple como reconectar con un antiguo colega o invitar a un compañero de equipo para una charla informal.
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Estrategias de liderazgo para fomentar el bienestar del equipo
Los líderes tienen una enorme influencia en la formación de la cultura laboral, particularmente en entornos remotos o híbridos. Ya que el aislamiento puede ser fácil de disfrazar, los gerentes deben estar atentos a señales sutiles, como la disminución del compromiso, plazos no cumplidos o un cambio notable en el tono de las comunicaciones. Si un empleado parece más retraído, inicia una conversación confidencial y más compasiva.
Conéctate activamente y con regularidad con tu equipo. No esperes a que sean ellos quienes inicien las conversaciones; eso generalmente los pone en una situación incómoda. Inicia el diálogo haciendo preguntas que realmente generen conversaciones genuinas. Tal vez algo tan sencillo como "¿Cómo te fue el fin de semana?" o "¿Cómo te has sentido últimamente?" puede crear el espacio necesario para discusiones más profundas.
Los líderes también deben normalizar las conversaciones sobre el bienestar mental. Hablar abiertamente sobre la salud mental en las reuniones de equipo permite que las personas se sientan seguras al compartir sus desafíos personales sin temor a ser juzgadas. Entrenar a los gerentes en apoyo a la salud mental les proporciona las herramientas necesarias para reconocer el malestar emocional y responder de manera efectiva cuando sea necesario.
Además, cuidar tu propia salud mental es importante no solo para tu bienestar, sino también porque te permite cuidar de los demás. Después de todo, "no puedes verter de una copa vacía", lo que significa que si estás agotado, es prácticamente imposible ofrecer ayuda genuina o estar presente en el momento cuando colegas, amigos o familiares necesiten apoyo.
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Creando espacios seguros en el lugar de trabajo
Las empresas prosperan cuando sus empleados se sienten libres de llevar todo su ser completo al trabajo, sin importar dónde se encuentren. Sin embargo, ser uno mismo en el trabajo no debería significar compartir en exceso o ignorar la cortesía profesional. Se trata de expresar quién eres dentro de los límites profesionales y mostrar consideración por quienes te rodean.
Las conversaciones regulares sobre el bienestar mental, comenzando desde el proceso de incorporación y continuando a través de reuniones semanales 1:1 y revisiones trimestrales, refuerzan aún más el mensaje de que no estar "bien" es humano y buscar apoyo es completamente normal. Ofrecer flexibilidad en cómo se realiza el trabajo y proporcionar beneficios que satisfagan las necesidades reales de los empleados, como programas de asistencia al empleado (EAP), aplicaciones de meditación, fondos de bienestar y acceso a recursos de navegación de atención, son formas efectivas de apoyar a los empleados y demostrar que te importa su bienestar integral.
Cuando los empleados se sienten genuinamente conectados, van más allá de las interacciones meramente transaccionales y avanzan hacia una colaboración más profunda. Las ideas fluyen con mayor facilidad, la moral mejora y la confianza se convierte en una fuerza guía en cada equipo. Este sentido de conexión y pertenencia puede ser especialmente valioso durante periodos de transición o tiempos difíciles para una empresa.
Es en estos momentos cuando se puede ver la resiliencia en acción, ya que cada miembro del equipo obtiene fortaleza de la dependencia mutua. Esto resalta un principio clave: la fortaleza y el compromiso positivo de cada miembro del equipo multiplican la efectividad general del equipo y, en última instancia, el éxito de la organización.