Tim Cook y la lección que transformó su liderazgo: la flexibilidad de Steve Jobs El actual CEO de Apple reveló cómo la apertura mental de Steve Jobs marcó el rumbo de la compañía.

Cuando Tim Cook dejó su puesto en Compaq, una empresa sólida y líder en la industria tecnológica, para unirse a Apple en 1998, tomó un riesgo que pocos habrían considerado. En ese entonces, Apple estaba al borde de la quiebra. Sin embargo, la visión de Steve Jobs y su promesa de transformar la industria tecnológica convencieron a Cook. Hoy, no tiene dudas: "Fue la mejor decisión de mi vida".

Durante más de una década, Tim Cook trabajó estrechamente con Jobs, absorbiendo lecciones que, según él, continúan guiando su liderazgo como director ejecutivo de Apple. Entre las enseñanzas más valiosas destaca una habilidad rara en el ámbito empresarial: la capacidad de cambiar de opinión cuando las evidencias lo justificaban.

"Steve cambiaba de opinión cuando alguien le mostraba los argumentos adecuados", compartió Cook en una entrevista con The Wall Street Journal.

Aunque Steve Jobs era conocido por su perfeccionismo y opiniones firmes, quienes trabajaron de cerca con él resaltan su disposición a escuchar y considerar perspectivas distintas.

"No muchas personas pueden dejar atrás sus opiniones pasadas. Steve lo hacía, y esa habilidad fue una de las más sorprendentes que descubrí en él", afirmó Tim Cook.

Esta flexibilidad no solo permitió a Jobs tomar decisiones más acertadas, sino que también inspiró a su equipo a adoptar una mentalidad abierta y enfocada en la mejora constante.

"Steve no tenía miedo de admitir que estaba equivocado si eso significaba mejorar un producto, un proceso o una idea. Esa lección es parte del ADN de Apple", concluyó Cook.

El vínculo entre Tim Cook y Steve Jobs trascendió lo profesional. Al asumir la dirección de Apple tras la muerte de Jobs en 2011, Cook se comprometió a mantener a la compañía en la cúspide, llevando consigo los valores y enseñanzas de su mentor.