Los smartphones con pantallas autorreparables podrían ser una realidad para el 2028 Los teléfonos inteligentes tendrían la capacidad de regenerar sus displays en unos cinco años.
Por Entrepreneur en Español Editado por Eduardo Scheffler Zawadzki
Los smartphones del futuro podrían tener una sorprendente habilidad: reparar sus propias pantallas. Según CCS Insight, una firma analista líder en tecnología, se espera que los teléfonos inteligentes con pantallas "autocurativas" comiencen a aparecer en el mercado para el año 2028.
Esta innovación podría cambiar la forma en que manejamos los daños en nuestros dispositivos móviles.
La idea detrás de esta tecnología es la incorporación de un "nano recubrimiento" en la superficie de la pantalla. Cuando se raya la pantallas este recubrimiento crea un nuevo material que reacciona cuando se expone al aire y rellena la imperfección, evitando que el daño se extienda.
Según el director de investigación de CCS Insight, Ben Wood, esta tecnología está más cerca de la realidad de lo que muchos podrían pensar. En una entrevista con CNBC, Wood afirmó: "Esto no pertenece al ámbito de la ciencia ficción, se puede hacer". Sin embargo, también enfatizó la importancia de establecer expectativas realistas sobre las capacidades de autocuración, señalando que se trata principalmente de reparaciones mínimas en la superficie.
Aunque la idea de crear este tipo de tecnología no es nueva, los fabricantes han estado explorando diversas técnicas para lograr esta función a lo largo rde los años. En 2013, LG presentó un teléfono inteligente llamado G Flex, que presentaba una pantalla curva y un revestimiento "autorreparable". Motorola también ha patentado una pantalla hecha de un "polímero con memoria de forma" que se repara a sí misma cuando se aplica calor al material.
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A pesar del progreso en la investigación y desarrollo, aún existen desafíos para llevar esta tecnología al mercado masivo. Las empresas necesitan realizar inversiones significativas para garantizar la viabilidad de estas innovaciones y educar a los consumidores sobre los límites de las reparaciones automáticas. Además, existe el temor de que los entusiastas de la tecnología puedan intentar poner a prueba estas capacidades de autocuración de manera inapropiada.
A medida que los fabricantes de teléfonos inteligentes continúan explorando nuevas fronteras en la tecnología de visualización, resulta emocionante contemplar un futuro donde nuestros dispositivos no solo sean más flexibles y duraderos, sino también capaces de repararse a sí mismos, redefiniendo así nuestra relación con la tecnología móvil.
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