"Los algoritmos no sienten", el cantante Nick Cave arremete en contra de Chat GPT-3 y la inteligencia artificial El artista reaccionó a una canción creada por la inteligencia artificial inspirada en su estilo.
Por Eduardo Scheffler Zawadzki Editado por Eduardo Scheffler Zawadzki
El cantante australiano Nick Cave tiene una página llamada The Red Hand Files en la que responde a las preguntas que sus fans le hacen.
Cave ha abordado todo tipo de temas: desde cómo se siente al ver su reflejo en el espejo, hasta el complejo proceso de superar la muerte de dos de sus hijos (en eventos separados).
Ahora el artista ha sido interrogado en torno a la herramienta de inteligencia artificial Chat GPT y a la letra de una canción que la plataforma escribió inspirándose en su estilo.
Un usuario llamado Mark le lanzó la pregunta: "Le pedí a Chat GPT que escribiera una canción al estilo de Nick Cave y esto es lo que produjo. ¿Qué te parece?".
Luego el usuario pegó la letra completa de la canción, cuyo coro es:
I am the sinner, I am the saint
I am the darkness, I am the light
I am the hunter, I am the prey
I am the devil, I am the savior
O traducido al español:
Yo soy el pecador, yo soy el santo
Yo soy la oscuridad, yo soy la luz
Yo soy el cazador, yo soy la presa
Yo soy el diablo, yo soy el salvador
Nick Cave, quien ha cautivado a millones de fans con un peculiar estilo en el que se entrelazan todo tipo de emociones, algunas esperanzadoras, algunas realmente oscuras, arremetió en contra de la herramienta:
"Lo que ChatGPT es, en este caso, es la replicación como una parodia. ChatGPT puede ser capaz de escribir un discurso o un ensayo o un sermón o un obituario, pero no puede crear una canción genuina. Tal vez con el tiempo podría crear una canción que es, en la superficie, indistinguible de una original, pero siempre será una réplica, una especie de burlesque" escribió el cantante.
Las herramientas de creación de texto impulsadas por la inteligencia artificial, como Chat GPT-3, utilizan el machine learning para simular el modo en que escribimos los seres humanos. Un usuario puede pedirle que redacte algo utilizando el estilo de un escritor o cantante famoso (como Nick Cave) y la herramienta creará una pieza basada en la información con la que cuenta en torno a dicho artista.
El debate sobre la capacidad que una máquina tiene para imitar o, quizás, superar al propio artista está vigente y hay quienes aseguran que ya empieza a ser complicado distinguir una obra de arte creada por una máquina, de aquella creada por un artista.
Cave no está de acuerdo. En su texto explica lo que implica para un ser humano crear una obra surgida de emociones que las máquinas no son capaces de experimentar.
"Las canciones surgen del sufrimiento, con lo que quiero decir que se basan en la compleja lucha humana interna de la creación y, bueno, hasta donde yo sé, los algoritmos no sienten. Los datos no sufren. ChatGPT no tiene ser interior, no ha estado en ninguna parte, no ha soportado nada, no ha tenido la audacia de llegar más allá de sus limitaciones, y por lo tanto no tiene la capacidad de una experiencia trascendente compartida, ya que no tiene limitaciones desde las cuales trascender. El papel melancólico de ChatGPT es que está destinado a imitar y nunca puede tener una experiencia humana auténtica, sin importar cuán devaluada e intrascendente pueda llegar a ser la experiencia humana con el tiempo", explica el artista.
Las herramientas impulsadas por la inteligencia artificial están cada vez más presentes en nuestras vidas y lo más probable es que terminemos utilizándolas para que nos ayuden a realizar tareas del día a día en la casa y en la oficina. De ahí a que sean capaces de reemplazar nuestras creaciones o a replicar nuestros más intrincados pensamientos hay una enorme diferencia.
Como dice Cave, los algoritmos no sienten y por más que los programemos, jamás sabrán lo que se siente tropezar, caer vencido por el dolor de una pérdida y después levantarse para seguir luchando, envuelto en esa magia que implica ser humano.