Ahora podrás comprar boletos de Ticketmaster sin salir de TikTok Esta herramienta ya está disponible en 21 países, incluidos México y Estados Unidos.

En una colaboración que comenzó en 2022 en Estados Unidos, TikTok y Ticketmaster están llevando la experiencia de compra de boletos para conciertos directamente a la pantalla de tu smartphone. Tras un lanzamiento exitoso, la empresa está expandiendo esta función a 20 países adicionales, entre ellos, México.

Esta herramienta permite a cualquier artista certificado en TikTok, en cualquiera de los países participantes, utilizar la función de venta de entradas de Ticketmaster para promocionar sus presentaciones en vivo.

De acuerdo con Techcrunch, los videos de los artistas certificados mostrarán una leyenda con el logo de la empresa de venta de entradas y la opción de obtener boletos.

Al seleccionar esta opción, los usuarios son llevados a una nueva ventana dentro de TikTok con información detallada sobre el concierto, los artistas participantes y datos relevantes.

Además, encontrarán un botón que los redirigirá al sitio web de Ticketmaster sin salir de la aplicación de TikTok. Desde allí, podrán completar el proceso de compra de boletos de manera fluida, como si estuvieran directamente en la página oficial.

La integración no solo agrega comodidad para los fanáticos, sino que también brinda una plataforma valiosa para más de 75,000 artistas en más de 20 países. La presencia de esta función se extiende a Reino Unido, Irlanda, Australia, Alemania, Francia, Canadá, México, Austria, Bélgica, República Checa, Dinamarca, Finlandia, Italia, Países Bajos, Nueva Zelanda, Noruega, Polonia, Suiza, España y Suecia.

De esta manera, Ticketmaster sigue sin escatimar en esfuerzos para lograr que la venta de boletos sea cada vez más segura y al alcance de todos.

Por ejemplo, apenas en agosto de este año lanzó Safetix, el código de barras dinámico que se actualiza cada 15 segundos y previene, en gran medida, los fraudes.

Como publicó Entrepreneur en español, Ticketmaster comenzó a dejar de permitir que las personas entren a los eventos con capturas de pantalla.