Tesla despide a empleado que dormía en su auto y se bañaba en la oficina para trabajar más tiempo Nico Murillo se enteró de que ya no tenía trabajo cuando se le negó la entrada a su centro de trabajo.

El pasado mes de abril, Tesla despidió al menos al 10% de sus trabajadores. Eso equivale a más de 14,000 empleados a nivel mundial.

De acuerdo con reportes, los empleados de Tesla se enteraron de que habían sido despedidos al llegar a las entradas de sus lugares de trabajo y descubrir que los guardias de seguridad escaneaban las credenciales para identificar a quienes ya no formaban parte de la compañía.

Uno de los casos más sonados es el de Nico Murillo, un exsupervisor de producción en las instalaciones de Fremont, en California, quien compartió su experiencia de despido en su perfil de LinkedIn.

Murillo, quien en sus cinco años en Tesla ascendió desde un puesto de nivel básico hasta convertirse en supervisor de producción, había adoptado un compromiso extremo con su trabajo. Buscando cumplir con sus responsabilidades laborales, llegó a dormir en su auto y utilizar las duchas y microondas de la empresa para ahorrar tiempo y energía en su largo viaje diario, y pasar más tiempo en la oficina.

Pero a pesar de su dedicación, el hombre fue despedido sin previo aviso.

Por medio de un cronograma Murillo narró cómo es que, de un momento a otro, se quedó sin trabajo:

• 4:30 am: Abrí mi computadora portátil, la cuenta estaba desactivada. Pensé que era solo otro problema, así que no pensé en nada.
• 5:00 am: Normalmente reviso mis correos electrónicos mientras viajo al trabajo en piloto automático (1 hora y 30 minutos en auto). En el correo electrónico se lee: "Desafortunadamente, como resultado de la reestructuración, su posición ha sido eliminada."
• 5:05 am: Le envié un mensaje de texto a mi gerente, pero él dijo: "Todos lo recibieron, obtendremos más información más tarde."
• 5:50 am: Traté de ingresar, y el guardia de seguridad me quitó la credencial y me dijo que me habían despedido.
• 6:00 am: Me senté en mi auto con incredulidad.

"Creo que todo sucede por una razón, ya sea buena o mala", dijo Murillo.

Hace unos meses Elon Musk reveló al ser entrevistado para un podcast que durante varios años seguidos tuvo que aplicar el trabajo ultra duro, juntando más de 100 horas de trabajo en una semana (aunque aclaró que no lo recomienda).

Varios de sus empleados han tratado de seguir la misma disciplina, pese a que esto no parece garantizar al subsistencia en las empresas del empresario.

Y es que Carrillo no es el único. Cuando Musk adquirió Twitter, se hizo viral el caso de Esther Crawford, una mujer que dormía en el piso de la oficina para poder cumplir con las exigencias de su puesto. Unos meses después de conocerse su caso, la mujer fue despedida.