Seguridad en transacciones digitales, prioridad para el crecimiento de las empresas: Pagaloop En un mundo cada vez más digitalizado, la seguridad en las transacciones en línea se ha convertido en una prioridad esencial para el crecimiento de las empresas.
Por Gerardo Briones
Key Takeaways
- En LATAM, se pierde hasta el 3.9% de los ingresos de e-commerce por fraudes electrónicos.
- México ocupa el segundo lugar en fraudes electrónicos, solo detrás de Brasil.
Las opiniones expresadas por los colaboradores de Entrepreneur son personales
El mercado de pagos digitales ha crecido de manera importante en Latinoamérica, impulsado por el e-commerce, el incremento en la penetración de TPVs y el número de tarjetas en circulación. En 2022, en México, el 88% del valor de las transacciones de e-commerce se pagaron con tarjeta de crédito, tarjeta de débito o billetera digital, de acuerdo con información de The Global Payments Report 2023 Worldpay. Esto genera muchos beneficios para los usuarios que hacen y reciben pagos en línea, pues cada vez cuentan con más métodos de pago para realizar sus transacciones.
Desafortunadamente, con este crecimiento de los pagos digitales también aumenta el fraude electrónico. En Latinoamérica, esto se ha convertido en un problema latente que afecta a los usuarios y comercios. De acuerdo con un estudio publicado en 2022 por Cybersource, la región perdió el 3.9% de los ingresos de e-commerce por fraudes electrónicos y tuvo contracargos derivados del fraude en 3.7% de los pedidos de e-commerce.
En el caso de México, Lexis Nexis publicó el estudio El Verdadero Costo del Fraude en América Latina donde señala que el país ocupa el segundo lugar en fraude, solo detrás de Brasil, y el costo de cada transacción fraudulenta le cuesta a las empresas mexicanas en promedio 3.8 veces su valor.
La confianza del usuario es la base de cualquier plataforma de pagos. La situación y dimensión del problema de fraude electrónico en México lleva a que las empresas participantes del ecosistema de pagos digitales tengan que implementar medidas de seguridad para sus usuarios mediante herramientas de última tecnología. Nuestro enfoque es garantizar la máxima seguridad del usuario y sus transacciones sin comprometer la facilidad de uso.
Ante el reto que presenta el fraude electrónico en medios de pago digitales, plataformas de pagos como Pagaloop priorizan el desarrollo tecnológico de herramientas de última generación para proteger la seguridad de los datos personales y financieros de los usuarios y sus transacciones, cumpliendo con los estándares de seguridad informática más sofisticados de la industria.
Gracias al uso de las siguientes cuatro herramientas de seguridad, es posible mantener un 0% de contracargos en las últimas transacciones de nuestros usuarios:
- Certificación de PROSA 3D Secure como procesador de pagos con tarjeta de crédito: PROSA es una de las cámaras de compensación más grandes de América Latina y a su vez está certificada por el Banco de México. Esta certificación de seguridad bancaria llamada 3D Secure brinda un estándar robusto de validación y es utilizado en todas las transacciones. Respalda tanto a la plataforma de pagos como al cliente para asegurar que hay un doble factor de autenticación.
- Certificación PCI Nivel 1: Es un estándar de seguridad que utilizan las aplicaciones que manejan tarjetas de crédito. Al contar con esta, los clientes y usuarios tienen el respaldo de que todos los datos que ingresen en la aplicación pasan por la certificación, evitando violaciones de información de sus tarjetas de crédito. En combinación con las otras herramientas, se generan capas de blindaje adicionales sin obstruir la experiencia del usuario.
- Tokenización de datos y bóveda virtual: Todos los datos de las tarjetas de los clientes se reemplazan con un código único llamado token, generado por alguno de los principales emisores de tarjeta de crédito. Este token a su vez se almacena en una bóveda virtual que está en la nube y se utiliza cada vez que se realiza un pago. La tokenización de la información del cliente y sus tarjetas implica que todos los datos están encriptados y por lo tanto, la herramienta de pagos nunca tiene acceso a ellos. El resguardo de los tokens en la bóveda virtual no nada más es un elemento de seguridad, si no que genera una mejor experiencia para el cliente ya que no necesita ingresarlos cada vez que requiere hacer una transacción.
- Prevención de fraudes: La empresa cuenta con un equipo de prevención de fraudes dedicado que monitorea las transacciones que se realizan a través de la plataforma y si se detecta que hay algo fuera de lugar, se solicita una validación adicional. También, dependiendo del tipo y nivel de usuario, se requieren procesos adicionales que permiten asegurar la transacción y el pago.