Escuelas de Seattle demandan a empresas tecnológicas por el daño que las redes sociales provocan a sus estudiantes La demanda pide una compensación económica por el gasto que las escuelas han tenido que hacer para advertir a los estudiantes del peligro que las redes sociales implican.
Por Entrepreneur en Español Editado por Eduardo Scheffler Zawadzki
Como cualquier herramienta tecnológica, las redes sociales no son buenas ni malas. Todo depende del uso que se les dé.
Para algunos son fuente de agobio y estrés, y pueden tener un impacto negativo en su salud mental. Para otros representan la herramienta ideal para estar conectados con sus amigos y familiares, además de ayudarles a mantenerse siempre informados.
Lo que es un hecho es que hoy pasamos varias horas al día interactuando con las redes sociales y, sobre todo, las generaciones más jóvenes las utilizan de manera (casi) continua.
Según las escuelas del Distrito # 1 en Seattle, Estados Unidos, las redes sociales, han tenido un impacto negativo en la salud mental de sus estudiantes y por lo tanto han decidido demandarlas.
En la demanda presentada el pasado 6 de enero las escuelas culpan a Alphabet (Google, YouTube), ByteDance (TikTok), Meta (Facebook, Instagram) y Snap Inc (Snapchat) de crear un entorno que propicia las crisis de salud mental entre los jóvenes estudiantes.
La demanda explica: "Esta crisis de salud mental no es un accidente. Es el resultado de las elecciones deliberadas y las acciones afirmativas de los demandados para diseñar y comercializar sus plataformas de redes sociales para atraer a los jóvenes".
¿Qué dicen las escuelas en torno al uso de las redes sociales por parte de sus estudiantes?
Las escuelas argumentan que la conducta de los jóvenes es más susceptible a ser manipulada debido a que sus cerebros no se han terminado de desarrollar y como consecuencia de esto son más impulsivos y no tienen la madurez emocional que tienen los usuarios adultos.
En otro párrafo del texto, se explica: "Los adolescentes son conscientes del control que las redes sociales tienen en sus vidas, pero aun así no pueden dejar de usarlas. El 36% de los adolescentes admiten que pasan demasiado tiempo en las redes sociales. Y más de la mitad de los adolescentes dicen que renunciar a las redes sociales sería algo difícil, y casi uno de cada cinco adolescentes dijo que renunciar a las redes sociales sería muy difícil".
La demanda busca que las escuelas obtengan una compensación económica pues el uso excesivo de las redes sociales por parte de los alumnos a obligado a las escuelas a tener que capacitar a su personal para poder advertir a los alumnos sobre el peligro que las redes suponen.