No esperes a que se te ocurra la gran idea de negocio, mejor sal y encuéntrala En lugar de esperar a que se te ocurra la idea perfecta, con un poco de intención, compromiso y planificación, puedes encontrarla en tus propios términos.
Por Christopher Rannefors Editado por Chelsea Brown
Este artículo fue traducido de nuestra edición en inglés.
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La mayoría de los profesionales afirman que quieren iniciar su propio negocio, pero un porcentaje extraordinariamente pequeño realmente lo desea. Las excusas incluyen obligaciones familiares, mal momento, aversión al riesgo, ahorros insuficientes, etc., pero la excusa más común que escucho es que simplemente están esperando que "se les ocurra" la idea correcta. Tenemos una fantasía caricaturesca de que un día un foco se encenderá en nuestras cabezas mientras buscamos inspiración pura para una idea tan original o tan matizada que nos sentimos absolutamente obligados a convertirnos en empresarios para llevarla al mercado. Si bien pueden existir momentos de iluminación para algunos emprendedores selectos, para la mayoría de los grandes conceptos de productos o negocios que existen, debe ser muy intencional la forma en que traza un camino para descubrirlos.
Fundé una pequeña empresa innovadora y rentable que me llevó hasta Shark Tank , los 30 menores de 30 de Forbes y más de $1 millón de dólares en ingresos en solo unos pocos años. La idea no se me ocurrió solo. En cambio, tomó cuatro meses de tiempo altamente organizado e intencional para encontrarlo. Si quieres encontrar la idea para startup , estos son los pasos que tienes que seguir:
1. Comprometerse con un resultado previsto, un cronograma y una línea del tiempo
Empieza por hacer que tu proceso de ideación tenga un principio y un final, junto con un horario específico de sesiones de trabajo. Mi socio comercial y yo nos comprometimos a reunirnos por un período de seis meses al menos dos veces por semana por la noche durante bloques de cinco horas los martes y jueves. Nuestros resultados previstos eran un concepto de producto con un plan G2M (Go to Market) lo suficientemente fuerte en el que nos sintiéramos tan seguros como para comprometernos por completo. Si aún no tuviéramos nuestra idea en seis meses o no nos sintiéramos confiados en la que teníamos, entonces la desecharíamos y dejaríamos de hacerlo en esta ronda. Si no estableces una fecha de finalización estricta, corres el riesgo de perder el sentido de la disciplina que va de la mano con la urgencia.
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2. Haz que tu familia participe en el compromiso
No te apresures en la oscuridad. Desde el primer día de tu compromiso, comparte el plan y la inversión de tiempo con tu familia y enfatiza por qué esto es tan importante para ti. Lo más probable es que te animen y sean algunos de tus mayores defensores. No ser abierto sobre su viaje de ideación probablemente generará resentimiento. Si tu familia es lo suficientemente amorosa como para permitirte dedicar todo este tiempo extra a su idea, asegúrete de tomar el relevo asumiendo tareas adicionales en la casa o planeando algunas noches de cita adicionales. Nunca está de más mostrarles cuánto aprecias su apoyo.
3. Forma barandillas derivadas de tus intereses, experiencia y apetito por el riesgo
Comienza definiendo barandillas blandas y duras para ayudar a reducir tu ruta de ideación. Mi cofundador era arquitecto y a los dos nos encantaba trabajar la madera. De acuerdo... tal vez algo hecho de madera. Ambos éramos ávidos conservacionistas, así que tal vez algo relacionado con la naturaleza. No estábamos ansiosos por invertir mucho dinero por adelantado en el negocio, por lo que tal vez un producto podría funcionar bien en una plataforma de financiación colectiva. La mayoría eran barandillas blandas que aprovechaban nuestras fortalezas y áreas de interés, lo que generalmente conduce a mejores resultados de todos modos, pero al final del día, el propósito de poner barandillas es enfocar su ideación. No puedes hervir un océano, pero tal vez puedas hervir una piscina llena de agua de mar. Sugiero encarecidamente pasar tus primeras reuniones elaborando estas barandillas antes de sumergirte en una lluvia de ideas abierta.
4. Adopta diversas técnicas de intercambio de ideas y sumérgete en entornos estimulantes
No te limite a sentarte en una habitación y mirar una pantalla. En su lugar, investiga y adopta una amplia variedad de técnicas de lluvia de ideas (es decir, mezcladores de cócteles, escalera de tijera, tormenta de roles, etc.) mientras te apegas a los cuatro roles clave de la lluvia de ideas: centrarte en la cantidad, retener las críticas, aceptar ideas descabelladas y combinar ideas para genrar más ideas Lo mejor que puedes hacer es rodearte de una amplia gama de estímulos. Pasábamos horas paseando por los pasillos de Walmart simplemente mezclando mentalmente diferentes productos en nuestras cabezas. Walmart es una delciia para la lluvia de ideas sobre productos.
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5. Iterar, desafiar, evolucionar
Una vez que hayas acumulado una cantidad de ideas posibles, ingresa a la fase de evaluación. Aquí es donde puedes comenzar a ser crítico con tus ideas: evalúa cómo se alinean con tus barandillas, usa matrices para determinar las clasificaciones de viabilidad, etc. Presta atención a tu entusiasmo durante esta fase. ¿Qué ideas te encuentras defendiendo más? ¿Por qué? Incluso si algunas ideas tienen más desafíos que otras, tu pasión te impulsará y te ayudará a superarlos cuando luego decidas llevarla al mercado.
6. Una vez que te comprometas, no dudes de ti mismo
Una vez que llegues a la idea de que has hecho suficientes agujeros hasta el punto de que te sientes realmente seguro, simplemente hazlo. Recuerda, no decidiste convertirte en emprendedor solo por un momento fugaz en el que se te prendió el foco... simplemente invertiste meses de tiempo altamente intencional para llegar a una idea bien examinada. Ten confianza en eso y llévalo a la siguiente etapa.
Deja de esperar a que se te ocurra la idea de la bombilla, sal y encuéntrala. ¿Qué estas esperando?
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