Cómo pedir la ayuda que necesitas para alcanzar el éxito A veces, obtener ayuda dentro de tu organización puede ser complejo. Con estos tres consejos, puedes convertirte en un profesional en la defensa de ti mismo y asegurarte de que no haya nada que se interponga en tu camino.
Por Alexa Dagostino Editado por Eduardo Scheffler Zawadzki
Las opiniones expresadas por los colaboradores de Entrepreneur son personales
Pedir ayuda nunca es divertido.
Sé lo que estás pensando. Si necesitas ayuda, ¿por qué no preguntar?
La verdad es que pedir ayuda nos pone en una posición vulnerable. Cuando lo hacemos, admitimos ante alguien con quien podríamos no sentirnos cómodos, que tenemos una debilidad. A veces, incluso tenemos que pedirle a una misma persona ayuda varias veces y eso nos puede avergonzar y hacernos dudar de nuestras habilidades.
Pero nada es peor que superar todos esos miedos, pedir ayuda y que nos respondan "pregúntale a alguien más" o "ya te lo expliqué ".
La verdad es que no haremos las cosas perfectamente bien la primera vez y habrá momentos en tu carrera en los que necesitarás ayuda. Te pedirán que hagas algo que no sabes cómo hacer y entonces vas a querer un segundo par de ojos para realizar un proyecto o incluso vas a necesitar algún consejo.
Pero es más fácil decir que necesitas ayuda, que pedirla. ¿Cómo le haces para obtener realmente la ayuda que necesitas?
Hay tres consejos que debes tener en cuenta tanto como empleado o como director de una empresa para asegurarte de que todos recibirán la ayuda que necesitan.
1. Sé asertivo al pedir ayuda
Uno de los mayores problemas que veo en los empleados de mis clientes que no reciben ayuda es que no son muy asertivos cuando la piden. A veces, pedir ayuda puede ser incómodo y no quieres acallar esa voz en tu cabeza que te dice que puedes resolverlo tú mismo, pero la única forma de conseguirla es pedirla sin vacilar.
Si pides ayuda como si fuera una ocurrencia, la persona a la que se la pides no lo verá como una prioridad. Cuando pidas ayuda, no digas: "Oye, si tienes un minuto, ¿te importaría revisar esto?" ni sigas con: "Tómate tu tiempo. No hay prisa en absoluto, no te preocupes".
Es muy probable que la persona a la que le estás pidiendo ayuda esté ocupada. Si no expresas claramente que necesitas ayuda ahora, no la vas a obtener.
Sé asertivo cuando preguntes y ve un paso más allá. Una excelente manera de hacerlo, es decir: "Oye, realmente estoy batallando con esto. ¿Estarías disponible en cualquier momento del día de hoy para ayudarme? Puedo verme contigo a las ___".
Cuando lo dices de esta manera, afirmas que necesitas ayuda ahora y que estás dispuesto a trabajar para que te la den. Es mucho más fácil para tu compañero de trabajo, jefe o cualquier persona con la que necesites hablar responder cuándo están libres, en lugar del clásico "luego lo vemos".
2. ¡Usa tu red!
Internet no te lo dirá todo. Claro, usarlo para encontrar respuestas a algunos de tus problemas es una forma muy efectiva de satisfacer tus necesidades a toda prisa. Pero ayudaría si consideraras la utilización de tu red para los problemas más complejos y abstractos.
Las personas que te rodean son algunos de los recursos más fructíferos que puedes pedir. Lo más probable es que sepan cómo ayudarte o al menos conozcan a alguien que sabe cómo.
No tengas miedo de acercarte a los que te rodean para pedirles su opinión (asertivamente). (Por cierto, esta es también una buena manera de establecer relaciones genuinas y con futuros clientes).
3. Haz que tu organización sea fácil de usar
Para todos los líderes que leen esto, mi mayor consejo para ustedes es hacer de su organización un lugar donde se brinde la ayuda. Lo último que quieres es que tus empleados les digan a sus compañeros de trabajo: "Ni te molestes en preguntar. Por aquí nadie te ayudará".
Acércate regularmente a tus empleados y pregúntales si necesitan ayuda y, lo más importante, mantente familiarizado con las tareas que realizan para que tú también puedas ser un recurso para ellos.
Tú eres el mayor recurso de tus empleados, ¡así que no dudes en compartir tu conocimiento con ellos!
En general, lo mejor que puedes hacer es no tener miedo de preguntar. Es difícil y puede ser incómodo, pero se vuelve más fácil con el paso del tiempo. Una vez que dejes de tener miedo de pedir lo que necesitas, tu éxito se disparará.