¿Estás comprometido o simplemente involucrado? Aquí te decimos por qué la "mentalidad de compromiso" es esencial para el éxito a largo plazo ¿En qué categoría caes? Eso hace toda la diferencia.

El éxito a largo plazo requiere de una mentalidad específica que te ayude a tomar las decisiones necesarias para lograr los objetivos que te propones. La verdad es que no es suficiente creer que puedes hacer algo, ser capaz es una parte de la ecuación, la otra es tu compromiso con el objetivo y los pasos que tienes que seguir para llegar a él.

Si no estás completamente comprometido con el proceso de lograr tus objetivos, no los alcanzarás o te tomará mucho más tiempo del necesario (esto se afirma en distintos estudios una y otra vez). El problema es que algunas personas confunden el estar involucrados con estar comprometidos, y hay una gran diferencia entre cómo se desarrollan estas dos actitudes en la vida.

Como ex infante de la marina, el nivel y la aplicación del compromiso son extremos, pero ofrecen resultados extremos. El nivel de compromiso con la tarea a realizar superará casi cualquier otro factor: tamaño, fuerza o experiencia. Esto funciona igual en el mundo de los negocios, si dos personas se suben a un ring de combate, apostaría por el que esté más comprometido con la victoria. En mi experiencia el más comprometido lo logrará el 99% de las veces.

Aprendí esto en mi etapa como infante de marina porque su filosofía elimina intencionalmente la "mentalidad de participación"; esa parte de ti que deja espacio para el fracaso desaparece una vez que pasas por el entrenamiento básico. En su lugar está la "mentalidad de compromiso", esa que dicta que trabajas hasta que se logre el objetivo. Es un poderoso interruptor mental.

Esta es la razón por la que los exoficiales militares funcionan tan bien como CEOs de las compañías de Fortune 500 y, por lo que esas compañías suelen tener tasas de desempeño más altas. El éxito sostenible se trata de dominar tu mentalidad y responsabilizarte, liberando la participación y aprendiendo a activar tu mentalidad de compromiso.

Comprometerse en lugar de involucrarse

Un compromiso es fijar un propósito que se une intelectual y emocionalmente a una tarea determinada. Ese es el secreto del éxito en cualquier situación porque se genera una devoción mental, emocional y física con el objetivo.

La razón por la que esto resulta tan efectivo es porque no estás simplemente involucrando tu mente; tu mente es sólo una parte de ti. Para comprometerte, debes involucrar tus emociones de modo que tu cuerpo pueda llevar a cabo los pasos necesarios incluso cuando estos representen un desafío. Sin el componente emocional, o peor aún, con un estado emocional negativo, resistirás, postergarás y no seguirás adelante en el momento indicado.

Cuando estás involucrado en algo, en lugar de comprometido, actúas y participas en el proyecto o tarea, pero no te vinculas emocionalmente. Piensa en esa reunión a la que realmente no quieres ir, pero sientes que tienes que hacerlo. Puedes llegar intencionalmente cinco minutos tarde o dejar de escuchar involuntariamente a mitad de la sesión, y es porque esta reunión no es tu prioridad.

La capacidad de lograr tus objetivos con la máxima integridad, disciplina y optimización depende de tu compromiso, no de tu participación.

El compromiso te convierte en un más confiable y mejor líder

La gente sigue instintivamente los líderes que los hacen sentir seguros y estables. La manera en que el compromiso se refleja en tus acciones (estar completamente presente, eliminar tareas innecesarias, optimizar el proceso, etc.) le envía a la gente una señal subconsciente de que eres un buen líder. El verdadero compromiso también aumenta la confianza en uno mismo y la satisfacción, lo que te permite hacer más.

Esto tiene que ver con cómo lideras desde el frente, pero también cómo primero te lideras a ti mismo. Es el liderar con autenticidad, amabilidad y un compromiso implacable con los objetivos de nuestros socios, clientes, equipo y nosotros mismos, lo que me ha dado los logros más significativos de mi carrera.

Cuando estás en un negocio basado principalmente en servicios, ya no se trata solo de tus objetivos. Debes considerar los objetivos de tus clientes, socios y equipo y estar tan comprometido con estos como con los tuyos. Eso significa estar emocionalmente conectado con los resultados que entregas. Cuanto más profundo sea tu compromiso, más pensarás y actuarás de manera diferente.

Evalúa desde un inicio

Cuando estás comprometido, ya sea en los negocios o en tu vida personal, haces lo que dices que vas a hacer, mueves cielo, mar y tierra para cumplir con tus compromisos. Cuando te conviertes en una persona que habitualmente hace lo que dice que va a hacer, evalúas todo de forma mucho más profunda y cuidadosa antes para no comprometerte con las cosas equivocadas.

Y seamos claros, las personas que no están comprometidas no son necesariamente malas, es más una señal de su rendimiento a futuro que otra cosa. Las personas pierden de vista o ignoran los compromisos todo el tiempo, y hacerlo no necesariamente habla de la calidad de la persona. Pero lo que sí representa es la capacidad de alguien para cumplir con su palabra. En los negocios, tu palabra debe ser valiosa para liderar poderosamente y tener la mayor probabilidad de éxito.

Cuando aprendes a evaluar adecuadamente una tarea, proyecto o situación antes de involucrarte en ella, resulta más fácil cumplir con los compromisos que adquieres. Antes de comprometerte, aprende a ver los posibles agujeros, trampas y desafíos que pueden surgir y a tenerlos en cuenta en tus estimaciones. Esa es una mentalidad completamente diferente que simplemente involucrarse y tratar de hacer lo posible.

Antes de comprometerte considera estas preguntas para evaluar adecuadamente la situación:

• ¿Dónde estás?
• ¿Hacia dónde te diriges?
• ¿Qué tienes que hacer para cumplir tu misión?
• ¿Cuáles son los posibles imprevistos con los que te podrías encontrar?
• ¿Hay algún costo oculto asociado con esos probables problemas?

Una vez que te enseñas a ti mismo a pensar de esta manera, tu capacidad para estar completamente comprometido, honrar esos compromisos y convertirte en un líder fuerte, construirá la base para el éxito a largo plazo.