6 pasos para convertirse en un CEO a prueba de recesiones ¿Una futura batalla económica? Equipemos a tu negocio para la guerra.

El pronóstico económico futuro luce impredecible. Puede que estés pensando, "¿Qué hay de nuevo en eso?" El hecho es que siempre hay incertidumbre. En 2008, millones de personas fueron sorprendidas en cuestión de días. Sin embargo, no se trata de alejarse de la incertidumbre. Se trata de enfrentarla con un blindaje, el blindaje económico de tu negocio, el equipo que probablemente sabías que necesitabas, pero que quizás aún no tienes.

El blindaje de tu negocio es esencial para su éxito. Seguro, puedes pasar unos años sin él, pero estarías contando demasiado en la suerte para salir adelante. Y, así como te cubres de pies a cabeza antes de entrar en la batalla, tu negocio también debe estar totalmente protegido. Si no has experimentado una disminución en los negocios debido a un colapso económico, es posible que nunca lo hayas considerado realmente. Entonces, ¿cómo se ve un CEO a prueba de recesiones? Construyamos tu blindaje juntos.

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1. Tu casco: La inmersión financiera profunda

Para empezar, cubramos tu cabeza. Caminar sin conocer tus finanzas es como entrar en batalla sin un casco.

Tus estados financieros no son solo para tus contadores. Son tu punto de referencia. Reserva de tres a cinco horas críticas a medida que el año llega a su fin. Escudriña cada rincón y recoveco de tus gastos. ¿Qué suscripciones están absorbiendo recursos sin generar rendimiento? Si las gigantes multinacionales están recortando minuciosamente su grasa operativa, eso te da una pista.

Cómo ponerte el casco: No se trata de reducir el tamaño de tu equipo, se trata de eliminar la redundancia. La optimización es clave. Analiza tus suscripciones, servicios de terceros y gastos adicionales. Te puedo garantizar que hay áreas en las que puedes ajustar.

2. Tu espada: El mantra sagrado del 10% de ganancia

Luego, querrás construir tu espada, algo que puedes usar en la batalla para defenderte.

Haz del mantra del 10% de ganancia algo no negociable. De cada dólar que ingrese, reserva inmediatamente un 10% como ganancia. Establecer una cuenta separada de "Ganancias" cambia el juego. Esta disciplina reformula tu perspectiva financiera. Te obliga a resolver tus necesidades financieras utilizando tu 90% siendo creativo y eliminando la grasa (paso 1). Pero también significa que tienes un nido financiero para usar cuando más lo necesitas. Y esta es tu arma más poderosa.

Cómo construir tu espada: Crea una nueva cuenta comercial llamada "Ganancias". Haz que tu contador (o tú mismo si es que manejas las finanzas de tu empresa) reserve el 10% de los ingresos comerciales en esta cuenta de manera regular (semanal/quincenal). Observa cómo crece.

3. Tu coraza: Fortaleciendo tus reservas

Si quieres tener un amortiguador para resistir cualquier impacto, necesitas una gran cantidad de reserva. Aquí es donde entra en juego tu coraza financiera.

Revisa tus reservas. Hemos entrado en una era en la que lo inesperado es la nueva norma. ¿Esas reservas de tres meses? Son básicas. Desafíate a ti mismo. ¿Puedes extenderlas a seis meses? ¿O por qué detenerte allí? Apunta a un año. Al guardar este fondo de reserva e incluso depositarlo en cuentas de ahorro de alto rendimiento (algunas ofrecen un atractivo 4-5%), no solo estás protegiendo tu negocio, sino preparándolo para despegar después de la crisis.

Cómo construir tu coraza: Utiliza tu revisión financiera (paso 1) para ver dónde puedes agregar más de lo que has eliminado en costos innecesarios. Sé crítico. Pide ayuda a tus asesores financieros, probablemente puedan ver qué puedes recortar para empezar a ganar.

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4. Tu escudo: fomenta el crecimiento de tu equipo

Tu escudo es tu amortiguador, capaz de resistir cualquier golpe. ¿Cómo creas un sólido amortiguador empresarial? Fortaleciendo a tu personal y a tu empresa.

Has apretado los cordones del monedero. Excelente. Pero ahora, asignemos esos ahorros sabiamente. Comienza internamente. Tu equipo, sus habilidades, su crecimiento, estos son activos intangibles. Considera iniciar un club de lectura de liderazgo. ¿Qué te parecen talleres mensuales de desarrollo personal? La esencia es fomentar una cultura de aprendizaje continuo. Cuando inviertes en su crecimiento, los dividendos que devuelven en productividad e innovación son exponenciales.

Cómo construir tu escudo: Envía una encuesta a tu empresa para saber qué les gustaría que se haga para el desarrollo personal y profesional. Comienza por ahí.

5. Tu cota de malla: La estrategia de marketing contraria

Tu armadura está casi completa. ¿Listo para salir a luchar? Tu cota de malla te hará más fuerte.

En tiempos económicos turbulentos, muchas empresas cierran de manera instintiva, recortando drásticamente sus presupuestos de marketing. Yo defiendo lo contrario. En lugar de retraerte, expándete. Mientras los competidores reducen del 100% al 20%, yo digo que ampliemos nuestros esfuerzos, llevándolos al 130%. Haz lo que otros no están haciendo; aquí es donde verás resultados verdaderamente únicos.

Cómo construir tu cota de malla: Aunque los patrones de compra pueden cambiar durante las recesiones, la compra en sí no cesa. Asegúrate de que tu marca siga estando en primera línea, lista para atender a este público exigente.

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6. Tu armadura de placas: Abrazar la agilidad y la innovación

La última pieza de tu armadura es tu armadura de placas. ¿Y qué hacen las placas? Protegen todo tu cuerpo. Veamos cómo proteger el cuerpo de tu negocio.

La innovación es clave. Las recesiones económicas suelen señalar un cambio más amplio. Las dinámicas del mercado están evolucionando. Los modelos tradicionales pueden ser desafiados. Son los CEOs que mantienen el dedo en el pulso y que están dispuestos a pivotar, adaptarse e innovar los que emergen no solo ilesos, sino que más fuertes.

Cómo construir tu armadura de placas: Se trata de aprovechar nuevas tecnologías, explorar mercados no explorados o simplemente reinventar un producto. Recuerda: la agilidad no es solo una ventaja, es una necesidad. Mantente nuevo. Mantente fresco. Y sigue innovando en tu negocio. No te vuelvas complaciente solo porque hasta ahora ha funcionado. Sé más fuerte y mejora.

Enfrentar una recesión es tanto una prueba de tu entereza como líder como de la solidez de tu negocio. Es un llamado a pensar más profundamente, actuar con más inteligencia y liderar con visión. Con la armadura de batalla que hemos construido para tu negocio juntos, puedes pensar, actuar y liderar ADELANTE en el tiempo. Ahora has recuperado el control en medio de la incertidumbre. Eres a prueba de balas. ¿Recesión económica? ¡Ja! Más bien, "¡Adelante, mundo!" Toma esto.