Los líderes fuertes utilizan estas 4 estrategias para construir confianza en su lugar de trabajo Construir confianza es crucial para un rendimiento óptimo, ya sea que tu empresa adopte completamente el trabajo remoto, híbrido o siga otro modelo. La investigación respalda esto de manera clara y contundente.

Hoy en día, más personas trabajan de forma remota, y existen muchas herramientas que los propietarios de negocios pueden utilizar para ayudar a sus equipos a mantenerse al día con su carga de trabajo, sin importar dónde estén ubicados. Pero la clave para hacer que un equipo remoto o híbrido funcione bien en conjunto no es la tecnología; es la confianza.

Según un estudio de 2023 realizado por WFH Research, aproximadamente el 13% de las personas con un empleo de tiempo completo trabajan desde casa el 100% de la jornada, y el 28% de este grupo de personas divide su tiempo entre la casa y la oficina. Esta tendencia de trabajo remoto es enorme en áreas de tecnología, finanzas y puestos administrativos.

Aún existe cierto debate sobre si todos debiéramos regresar a la oficina, pero la mayoría está de acuerdo en que probablemente una mezcla de trabajo en casa y en la oficina se convierta en la norma. ¿Por qué? Las empresas están viendo pruebas de que modificar sus políticas para permitir que las personas trabajen de manera remota puede aumentar la productividad y las ganancias, al mismo tiempo que mantiene felices y equilibrados a los empleados. ¡Es un ganar-ganar!

La confianza, no la microgestión, es la clave del éxito

Construir confianza resulta crucial para un rendimiento óptimo, ya sea que tu empresa adopte completamente el trabajo remoto, híbrido o siga otro modelo. La investigación respalda esto de manera clara y contundente.

Estudios realizados por Paul J. Zak, un neuro economista capacitado en Harvard, señalan que los empleados en lugares de trabajo de alta confianza son más productivos, colaborativos y leales. También son más felices y están menos estresados, lo que lleva a mejores resultados. Este enfoque de "confianza sobre vigilancia" es reflejado por líderes como Drew Houston, el CEO de Dropbox, cuya empresa funciona con un 90% de fuerza laboral remota.

Novakid, una empresa internacional completamente remota, ha logrado el éxito implementando estrategias específicas que fomentan la confianza entre los gerentes y el personal remoto. Las siguientes tácticas pueden ser utilizadas por cualquier líder empresarial que busque establecer un equipo remoto próspero.

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1. La construcción de confianza es el arma secreta

Los estudios muestran un vínculo claro entre la confianza (piénsalo como pegamento social) y las economías sólidas, y eso aplica también a las empresas. Pero para que la confianza arraigue, los líderes necesitan creer genuinamente en ella. No puedes construir una cultura empresarial confiable (remota, híbrida o en la oficina) si te la vives cuestionando a tu equipo.

La clave está en encontrar el equilibrio adecuado. Confía en tus empleados para que sean responsables, y dales el poder con las herramientas que necesitan para hacer bien su trabajo (piensa en software de gestión de proyectos y canales de comunicación claros). Pero no seas ingenuo: algún monitoreo es esencial para identificar cualquier problema de rendimiento.

Crea un sistema en donde todos se sientan responsables. Debería ser fácil señalar a colegas poco receptivos o plazos incumplidos. Esto se puede hacer a través de herramientas de productividad laboral y de gestión de flujos de trabajo. Lo más importante es que es posible hacerlo fomentando una cultura en la que todos se sientan cómodos hablando sobre sus preocupaciones.

2. Contratación basada en la confianza y autonomía

Las entrevistas de trabajo son una forma de encontrar personas excelentes que encajen con la cultura de tu empresa, especialmente personas que prosperen con la libertad que proviene de la confianza.

Perfecciona tus procesos de recursos humanos y habilidades de entrevista. Aprende a hacer preguntas que cuenten la verdadera historia: ¿Pueden manejar un desafío? ¿Cómo manejan los errores? ¿Son jugadores de equipo? Busca tanto sus habilidades como su personalidad: observa el lenguaje corporal y ve si sus respuestas se alinean con tus valores de confianza y honestidad.

Una vez que encuentres el ajuste adecuado, la integración debería ser fluida. No abrumes a los nuevos empleados el primer día: explícales su rol, establece expectativas, proporciona todos los materiales relevantes que necesitarán para su trabajo y luego retrocede. Confía en que se pondrán al día. Apreciarán la libertad y la responsabilidad, y establecerá el escenario para un estilo de trabajo confiable.

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3. Mantener a todos en la misma página

Construir un equipo que se responsabilice a sí mismo resulta clave, sin importar tu estilo de trabajo. Así es cómo puedes hacerlo:

• Establece expectativas claras: asegúrate de que todos sepan qué se espera de ellos.
• Comunicación abierta: mantén la puerta abierta; tu equipo debe sentirse cómodo hablando contigo.
• Retroalimentación regular: realiza controles regulares para identificar cualquier obstáculo. Sé honesto y claro si algo necesita mejorar.

Puede ser difícil implementar y gestionar la responsabilidad dentro de los equipos completamente remotos. La clave está en encontrar el equilibrio: empodera a tu equipo con autonomía, pero no temas abordar problemas de rendimiento. No quieres microgestionar, pero algún tipo de supervisión es necesaria. En última instancia, si alguien rinde consistentemente por debajo del nivel esperado, es importante tomar medidas, incluso hasta despedirlos. Esto muestra a todos que tomas la responsabilidad en serio.

4. Enfócate en resultados, no en actividades sin sentido

Olvídate de microgestionar con rastreadores de tiempo o software espía. La mejor manera de evaluar el rendimiento de forma remota es establecer deberes laborales claros, plazos y resultados esperados.

Los equipos remotos ya utilizan herramientas de gestión de proyectos y flujos de trabajo. Estas pueden mostrarte si alguien se está quedando atrás, pero el monitoreo constante no es la respuesta.

El software de seguimiento puede invadir la vida personal de los empleados, y eso está completamente prohibido. Confía en tu equipo para que hagan su trabajo; déjalos descubrir cómo ser más productivos. Tal vez eso signifique trabajar en ráfagas o fuera de horas típicas. Microgestionar con herramientas de monitoreo solo hace infelices y no productivas a las personas, y según un informe de Deloitte, está alimentando la tendencia de "renuncia silenciosa".